El Congreso acusó al mandatario republicano de incitar a la insurrección; el caso pasa al Senado.
La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, encabezó la sesión en la que el Congreso acusó al presidente republicano.
La Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó iniciar el proceso de destitución del presidente saliente, Donald Trump, acusado de incitar a la insurrección. Por 232 votos a favor y 197 en contra, el republicano se convierte en el primer presidente en la historia en ser juzgado en dos ocasiones.
Durante el debate previo a la votación, la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, pidió a congresistas hacer un “examen de consciencia”.
En la sesión, diez legisladores del Partido Republicano votaron a favor del proceso, y se unieron a los demócratas, que afirmaron que el presidente debía rendir cuentas.
El grupo de congresistas advirtió de “un claro peligro’’ si el Congreso no toma medidas antes de la investidura del demócrata Joe Biden el 20 de enero.
El proceso se lleva a cabo una semana después de que una multitud de simpatizantes de Trump irrumpió en el Capitolio, en un asalto en el que murieron cinco personas, incluido un policía. Días antes, el mandatario llamó a la población a protestar en Washington durante la confirmación del demócrata Joe Biden.
Hoy, de manera bipartidista, la Cámara demostró que «nadie está por encima de la ley, ni siquiera el presidente de Estados Unidos«, declaró Pelosi durante una ceremonia en la que firmó el cargo contra el republicano.
De ser declarado culpable, Donald Trump quedará inhabilitado para competir por la presidencia nuevamente en 2024.