- El director general del IMSS, Zoé Robledo, destacó el trabajo intersectorial para ampliar el número de camas hospitalarias en la atención de la pandemia.
- En los próximos días se prevé pasar de 161 a 291 camas reconvertidas.
Los titulares del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Maestro Zoé Robledo, y el director del Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI), Juan Ferrer Aguilar, sostuvieron una reunión de trabajo con el gobernador de Durango, José Rosas Aispuro, a fin de coordinar estrategias para fortalecer el Primer Nivel de Atención frente al COVID-19 y robustecer el modelo de Salud para el Bienestar (SABI).
Al respecto, el titular del Seguro Social resaltó que en mediante el trabajo intersectorial se ha atendido la reconversión hospitalaria para evitar la saturación o una posible situación donde no haya camas suficientes o ventiladores.
“A partir de este trabajo conjunto, compartido, estamos seguros que lo vamos a lograr. De las 501 camas que tiene el IMSS en Durango, durante los últimos meses reconvertimos 161 que habían sido suficientes para la atención de la pandemia, porque el número de contagios y hospitalizados no se había incrementado”, indicó.
En este sentido, Zoé Robledo comentó que a partir del aumento en el número de contagios por COVID-19, “desde hace dos semanas nos dimos a la tarea de incorporar a esas 161 camas, 130 camas más en el Hospital General de Zona No. 1, en Gómez Palacio; en Chapala y también en Pueblo Nuevo, en el Hospital de Subzona”.
Agregó que en los próximos días el objetivo es tener 291 camas para la atención de hospitalizados por el virus SARS-CoV-2.
“Esto es posible con el trabajo intersectorial, con la colaboración para poder derivar otro tipo de tratamientos o para apoyarlos con equipos que nos ha dado el INSABI, y fundamental: con el trabajo de médicos, médicas, enfermeras, enfermeros, de todas las instituciones que han hecho un trabajo leal y comprometido”, aseguró.
Por otra parte, el director general del Seguro Social dijo que el Modelo SABI está muy vinculado al programa IMSS-BIENESTAR, el cual opera en 19 entidades del país bajo el Modelo de Atención Integral a la Salud.
Indicó que gracias al trabajo de las comunidades rurales en el autocuidado, la sindemia ha sido asincrónica, “no se ha presentado de la misma manera en zonas rurales, ha sido una pandemia muy urbana”.
Agregó que el objetivo es fortalecer el primer nivel de salud del Seguro Social en las más de mil 500 Unidades de Medicina Familiar.
Por otra parte, comentó que una de las instrucciones del presidente Andrés Manuel López Obrador es que nadie se quede sin atención médica en caso de ser necesario.
Zoé Robledo indicó que ha sido muy importante la coordinación que existe entre la Federación, los gobiernos estatales y municipales “para conectar el gran esfuerzo que se está haciendo de la reconversión hospitalaria en el segundo y tercer nivel, con el primer nivel”.
Refirió que este tipo de encuentros y acciones también se han realizado en los estados donde hay algún repunte del número de casos de COVID-19.
En otro orden de ideas, el director del IMSS llamó a redoblar esfuerzos para continuar con la atención de los módulos respiratorios, tomar muestras de SARS-CoV-2 a casos sospechosos e identificar a los pacientes con alto riesgo.
Como parte de esta gira, las autoridades de salud y el mandatario estatal realizaron una mesa de trabajo para la erradicación de la Hepatitis C; hicieron una visita de supervisión a la Unidad de Terapia Oncológica del Hospital General de Zona con Medicina Familiar No. 1; recorrieron la Unidad de Medicina Familiar No. 1; y participaron en la reunión del Cuerpo de Gobierno de la Representación del IMSS en Durango.