La inflación en México aumentó en octubre de 2024, alcanzando una tasa anual de 4.76%, luego de dos meses de moderación.

Este incremento, desde el 4.58% registrado en septiembre, fue impulsado principalmente por el componente no subyacente, destacando las alzas en los precios de las frutas y verduras, según los datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).

En el segmento de productos agropecuarios, varios alimentos mostraron incrementos anuales significativos en sus precios durante octubre a consecuencia de las lluvias intensas y tormentas tropicales.

La papaya se destacó con un aumento de 48.5%, seguida por los nopales (47.7%), calabacita (44.3%), pepino (41.6%), chayote (31.5%), ejotes (31.4%), tomate verde (30.7%), jitomate (23.8%), uva (16.8%) y huevo (15.9%).

Estas variaciones reflejan el impacto de la inflación en productos básicos que son esenciales en la canasta alimentaria de los mexicanos.

El Índice Nacional de Precios al Productor (INPP), que mide las variaciones en los precios de bienes y servicios producidos en el país, también reflejó esta tendencia al alza.

En octubre, el INPP total, que incluye el precio del petróleo, mostró un incremento mensual de 0.42 por ciento y un aumento anual de 5.10 por ciento. En comparación, en el mismo mes de 2023, el índice había crecido 0.45 por ciento en tasa mensual, pero solo 1.31 por ciento en tasa anual, lo que indica una aceleración en los precios a nivel de producción en el último año.

Por sectores económicos, el INPP reveló que los precios de las actividades secundarias, correspondientes a la industria manufacturera, aumentaron un 0.54 por ciento a tasa mensual. Las actividades terciarias, que incluyen los servicios, subieron un 0.43 por ciento en el mismo periodo.

En contraste, los precios de las actividades primarias, principalmente el sector agrícola, tuvieron una disminución mensual de 0.82 por ciento, aunque aún muestran presión inflacionaria en algunos productos.

Además, el Índice de Mercancías y Servicios de Uso Intermedio, que también incluye el petróleo, registró un incremento mensual de 0.50 por ciento y un aumento anual de 4.65 por ciento. Este índice refleja el costo de los bienes y servicios necesarios para la producción de otros productos. Por otro lado, el Índice de Mercancías y Servicios Finales ascendió 0.40 por ciento a tasa mensual y 5.27 por ciento anual.

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