El proceso electoral 2024 – 2025, por medio del cual se habrán de renovar los 39 ayuntamientos de nuestra entidad, está por comenzar, con tres nuevos partidos que tendrán la oportunidad de presentar alternativas de votación pero que, difícilmente, se convertirán en una verdadera opción para buscar administrar alguno de ellos. La llegada del renacido Encuentro Solidario Durango, que había estado en la boleta en 2021 con personajes que, de alguna u otra forma, eran identificados como liderazgos sociales, pero que también está ligado a una derecha conservadora a pesar de haber sido aliado de la coalición que llevó a Andrés Manuel López Obrador, genera una mezcolanza a la que pocos podría identificar. Por otro lado, el Partido Villista y el Estatal Renovación, tendrán muy poco tiempo para mostrarse como opción, a la vez que contarán con recursos muy limitados, pues cada uno de estos tres partidos tendrá 2 millones 731 mil pesos para el ejercicio fiscal 2025, lo que los pone en una desventaja competitiva muy importante.
El partido más votado en los tres últimos comicios ha sido Morena, por lo que podría decirse, de manera simple, que es el favorito para ganar las próximas elecciones, sin embargo, no por ello ha sido el partido que haya ganado más posiciones ni tampoco quien haya gobernado más población en los municipios pues, aunque tuvo un buen número de alcaldes en la pasada elección de 2022, la densidad poblacional de los municipios que gobierna, es muy baja. En últimas fechas hemos visto cómo sus militantes y aspirantes han buscado mostrar que en ese instituto político impera la unidad, siendo que, hace apenas unos días, la presidenta del partido, Luisa María Alcalde, acompañada por la secretaria general, Carolina Rangel Gracida y su secretario de organización, Andrés López Beltrán, se reunieron con la dirigente estatal, Lourdes García Garay, para ir definiendo el camino de la elección, recordando que solo Durango y Veracruz tendrán comicios. Sin embargo, esta supuesta unidad ya se había cantado antes, sin que, a la mera hora, se hubiera visto reflejada en un verdadero trabajo conjunto, incluso con quienes decidían no operar en favor de quien encabezaba el proyecto o, peor aún, operando en contra.
Esto difícilmente se va a repetir, ya que, seguramente, estarán muy observados tanto por las dirigencias del partido, como por quien encabeza el gobierno federal, pues será la primera elección en la que la figura de Claudia Sheinbaum tenga que ser la marca diferencial, la primera en la que la dirigencia del partido a nivel nacional la encabeza una mujer y, por supuesto, la primera en la que ‘Andy’ tiene que legitimar su llegada al partido para sacudirse la pesada sombra de su padre, fundador y líder moral del movimiento. Seguramente la Región Lagunera, en donde tienen una gran fuerza, buscarán recuperar Gómez Palacio, donde suena el nombre de Marina Vitela, y querrán hacerse de Lerdo, donde ganaron la pasada elección para las diputaciones y cerraron el resultado para la alcaldía, hace tres años. En la capital son varios los nombres que suenan, desde la senadora Margarita Valdez, la diputada local Sandra Amaya, el regidor Jorge Silverio Álvarez, el exsenador José Ramón Enríquez, el delegado municipal del Bienestar, Iván Ramírez, entre algunos otros. Aquí falta ver si sus aliados, el partido Verde, que carece de liderazgos representativos en la mayoría de los municipios y el del Trabajo, que solo camina a donde les mande ‘Gonzalo’, irán acompañando la causa o ayudarán a pulverizar el voto cuatroteísta.
Por otro lado, la alianza triunfadora del 2022, al menos en el porcentaje de población gobernada, ya no podrá existir, pues el Partido de la Revolución Democrática quedó solo en el anecdotario político, por lo que esta vez solo podría ser conformada por las estructuras del Revolucionario Institucional y Acción Nacional. Sin embargo, varias han sido las señales de que ambos partidos podrían buscar, cada quien por su lado, presentar opciones para el electorado, lo que podría significar un suicidio electoral, tomando en cuenta los mismos números de las tres pasadas elecciones. En la capital, el nombre del actual alcalde, José Antonio Ochoa, era, hasta hace un par de semanas, el natural para pensar en repetir, sin embargo, ante medios de comunicación habló de estar concentrado en su gobierno y no estar pensando en la reelección, lo que llamó la atención por lo cercano del inicio del proceso, aunado a los rumores de una crisis interna en el PAN, donde al parecer no todos los grupos estarían de acuerdo en apoyarle nuevamente, por lo que han surgido otros nombres como los de los diputados locales Fernando Rocha y Alejandro Mojica, la senadora Gina Campuzano y la diputada federal Paty Jiménez, con los que, se especula, podrían buscar seguir gobernando como partido. Del PRI son dos los que ya levantaron la mano, la síndico Alicia Gamboa, quien expresamente ha declarado su intención de encabezar un proyecto, aunque dijo ser respetuosa de la decisión de su líder político, y el secretario de Educación, Guillermo Adame, quien ha estado trabajando en acercarse a la estructura del gremio magisterial, una que no lo recibió con los brazos abiertos a su llegada, y acordando múltiples prebendas con los líderes sindicales, si es que aún representan un liderazgo al interior del SNTE, quienes además son más identificados con otras fuerzas políticas, por lo que se ha corrido el rumor de que podría ir encabezando un proyecto, pero por otro partido.
Movimiento Ciudadano, un partido que ha ido creciendo en la entidad, tiene claro cuatro objetivos a mi entender: buscar la mayor cantidad de representantes en los cabildos; refrendar el triunfo que obtuvieron en San Pedro del Gallo con Salvador Carrasco; poner gran parte de los esfuerzos en Gómez Palacio, donde su coordinador estatal, Omar Castañeda, tiene gran presencia; y buscar hacer incómoda la elección en la capital, quizá con la figura del exalcalde, Jorge Salum.
Con todo esto que pasa entre partidos y con el ingrediente adicional de la posible elección de los miembros del Poder Judicial de manera concurrente, será interesante ver cómo decidimos los duranguenses repartir el pastel entre quienes buscarán convencernos de tener las mejores capacidades e intenciones.
Alejandro Flores de la Parra.