Las pensiones absorbieron un billón 302 mil 736.1 pesos el año pasado, 16 de cada cien pesos del gasto público de 2023, exhiben los informes sobre la situación económica, las finanzas públicas y la deuda pública presentados por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público esta semana.
Con ello, la pensiones contributivas –sin contar el programa social de ingreso mínimo para la población adulta mayor– representaron el gasto obligatorio más grande para las finanzas públicas, por encima del costo financiero de la deuda y las participaciones a estados y municipios.
El dato se publica a unos días de que el presidente Andrés Manuel López Obrador presente un paquete de reformas en las que se pretende incrementar la contribución del Estado para mejorar el retiro de los trabajadores. La iniciativa pasaría al Congreso a siete meses de concluir este sexenio y a cuatro de las próximas elecciones presidenciales.
López Obrador no ha adelantado sobre qué irá la modificación al sistema de pensiones, sólo ha expuesto que el objetivo es corregir la legislación antiobrerista” que dejó la administración del ex presidente Ernesto Zedillo, que los trabajadores puedan retirarse con 100 por ciento de su último salario y “que el gobierno va a asumir una parte considerable de este desequilibrio”.
El mero gasto en pensiones contributivas es el principal gasto obligatorio de las finanzas públicas, al estar garantizando derechos no se pueden reducir o modificar como otras áreas del presupuesto, así que entre 2022 y 2023 aumentó 4.5 por ciento, por encima de 1.8 por ciento que lo hizo el gasto público en general.