En una encantadora sorpresa para los asistentes, la Primera Dama de Estados Unidos, Jill Biden, se unió a la celebración de Halloween en la Casa Blanca luciendo un disfraz inesperado. En lugar de la tradicional elección de un disfraz típico, la Sra. Biden se transformó en «Willow el Gato» para deleite de los niños y adultos presentes en el evento que tuvo lugar en el South Lawn de la Casa Blanca el 30 de octubre
Ataviada con un traje de gato, orejas puntiagudas, y una expresión juguetona, Jill Biden encarnó perfectamente a este adorable felino. Su elección de disfraz fue recibida con entusiasmo y sonrisas, y rápidamente se convirtió en el centro de atención de la celebración de Halloween en la residencia presidencial.
Acompañada por un grupo de niños, la Primera Dama no solo se limitó a lucir su disfraz de gato, sino que también compartió su amor por la lectura. Tomando un libro en sus manos, Jill Biden se sentó con los pequeños y les leyó historias emocionantes, creando un ambiente de alegría y entusiasmo por la lectura.
El evento en la Casa Blanca reunió a estudiantes de escuelas públicas locales y a niños relacionados con el ejército en un ambiente festivo y seguro. Los disfraces de Halloween variados y creativos llenaron el South Lawn de energía y diversión.
La elección de disfraz de Jill Biden no solo mostró su espíritu festivo, sino que también resaltó su compromiso con la educación y el bienestar de los niños. La celebración de Halloween en la Casa Blanca se convirtió en una oportunidad para acercarse a la comunidad y crear recuerdos especiales para los más jóvenes.
La Primera Dama también se tomó el tiempo para saludar y conversar con los niños, creando un ambiente cálido y acogedor en esta noche especial. La seguridad y el protocolo sanitario se mantuvieron en alto nivel para garantizar que todos pudieran disfrutar de la celebración de manera segura y sin preocupaciones.
Jill Biden, en su papel de «Willow el Gato», demostró una vez más su versatilidad y su capacidad para conectar con la gente de todas las edades. Su elección de disfraz fue un toque encantador en una noche llena de alegría y camaradería en la Casa Blanca.