Internacional
Estamos apegados a las guerras y esto es trágico, declaró el Papa Francisco en un discurso improvisado.
El Papa, que improvisó un discurso en un momento en el que existe la amenaza de una guerra en Ucrania, recordó que Benedicto XV denunció la incivilidad de la guerra como una matanza inútil pero su advertencia no fue escuchada por los líderes de las naciones involucradas en la Primera Guerra Mundial.
Así como también fue desatendido fue el llamado de San Juan Pablo II para evitar el conflicto en Irak, reflexionó el Papa Francisco.
Francisco habló de que soplan vientos amenazantes en las estepas de Europa del Este, encendiendo las mechas del fuego de las armas y dejando helados los corazones de los pobres y de los inocentes.
«Parece que el mayor premio de la paz se debe dar a las guerras. Es una contradicción. Estamos apegados a las guerras. La humanidad avanza en las ciencias, en muchas cosas bellas, pero retrocede en hacer la paz: es campeona en hacer la guerra, y esto es una vergüenza para todos. Hay que orar por esto».
Calificó como lamentable que estando en el tercer milenio exista la necesidad de repetir palabras similares a las de Benedicto XV y, sin embargo, la humanidad parece todavía andar a tientas en la oscuridad.